
Los costes de implantación de e-Administración – 2ª Parte
enero 17, 2008Para intentar afinar un poco más la puntería, quizás sea mejor plantear otros dos posibles escenarios, para analizar los costes de implantación de la e-Administración.
Al lado de un escenario hipotético, planteamos otras dos posibles alternativas, una optimista y otra pesimista.
En el Escenario Optimista (escenario-optimista.ppt), lo que de verdad cuenta es la figura que indica la productividad. Ésta no arranca de cero, ya que los funcionarios poseen una serie de conocimientos y habilidades que les permite adecuarse rápidamente (prácticamente, desde el momento 0) a las nuevas herramientas, necesarias para la e-Administración (gestor documental, firma electrónica, nuevos procesos administrativos, etc.).
De esta forma, el momento del encuentro entre las inversiones realizadas por la Administración y su rentabilidad económica se realizará antes y disminuiremos el área roja.
Los «peros«: ¿está el cuerpo de los funcionarios, en todos los ámbitos, en condiciones de adecuarse desde el principio a esta nueva realidad? ¿Serán las herramientas a disposición de los funcionarios las más adecuadas para hacer más ágiles los trámites administrativos? ¿Alguien ha preguntado a los funcionarios su opinión?
Por desgracia, nadie pregunta a los funcionarios su opinión. Si nos preguntaran y los políticos manejaran la posibilidad de escuchar nuestras propuestas, otro gallo cantaría.
Cuando un político llega a una Administración no la conoce, por norma general, (salvo que «haya sido cocinero antes que fraile») y aceptar opiniones, propuestas e iniciativas de los funcionarios que conocen el funcionamiento interno, supondría un gran paso hacia una gestión interna participativa.